LOS TRES TRISTES TIGRES PROVINCIALES

Para los pillos y corruptos, el municipio chotano es un potaje muy apetitoso. Las razones rebosan, pero son tres las cardinales: 1) Ingentes recursos económicos que administran a su subalterno albedrío. 2) Una población insulsa que permite el latrocinio con el más pasmoso silencio y cuyos dirigentes se acurrucan al poder local para pesetear. 3) La carencia de una política nacional anticorrupción que permita poner tras las rejas a todos los facinerosos. Por ello, sin la más mínima dignidad se preparan para repetirse el plato en las elecciones municipales del 2014.

Esos tres señores que ambicionan nuevamente llegar al sillón municipal para lucrar y zurrarse sobre las esperanzas de Chota y los chotanos tienen denominadores comunes. Deplorables gestiones durante sus respectivas administraciones, profusa corrupción (por ello tienen juicios pendientes) y un evidente menosprecio hacia el pueblo. Nunca en la historia nuestra estuvimos tan perversamente gobernados con estos candidatos. Caos en todos los ámbitos, suciedad, ausencia de planificación, improvisación, contaminación, etc.

Jeiner Julón, el actual alcalde, que ya anunció entre sus acólitos su candidatura y oh sorpresa, hacer las obras necesarias que su incapacidad le impidió ejecutarlas durante los tres años anteriores. Recordemos que la única gran obra que hizo en la ciudad fue su pequeña mansión usando los volquetes del municipio y recursos investigados. Pero antes debe responder a los juicios pendientes que esperan sentencia: por lavado de activos y enriquecimiento ilícito en la Sala Supranacional de Lima y por peculado durante su gestión en Tacabamba en el juzgado de Chota.

Segundo Ticlla, cuyo mayor logro fue enriquecer a su socio con las adquisiciones municipales, su fallida reelección en las elecciones anteriores y su conducta matonesca con los periodistas que lo fiscalizaban (no olvidemos que ordenó la agresión contra el director de este semanario) también tiene lo suyo en la Sala de Chota por peculado, malversación de fondos y colusión. Juicio que extrañamente se va quebrando por razones anónimas. Sin embargo, como nos dateo un pajarito, le espera un dictamen que le sería desfavorable. Eso lo mantiene nervioso, igual que al actual alcalde, porque los inhabilitaría como candidatos y les esperaría la cárcel por ladrones.

Eduardo Rubio, quien su etapa de candidato se convirtió en la esperanza juvenil y en poco tiempo se transformó en la mayor decepción chotana, también anda en lo suyo por repetirse el potaje. Sin embargo su malísima gestión (allí está la gran inversión para destruir la antigua plaza de armas que era más presentable y acogedora), la corrupción y su anodina performance le pasarán factura. Antes debe responder en la sala de Chota un juicio por peculado de uso y peculado, en buen cristiano, por robo. Además, debe resolver sus entuertos familiares que lo despintan de cuerpo entero como el ciudadano que siempre simuló ser.

Notificados estamos, nos viene un suculento huaico de candidatos con tremebundos méritos. Todos enjuiciados por ladrones, pésimos gestores y peor administradores. Eso si, eficientísimos enriquecedores de sus arcas y la de sus socios. Dinero que ahora utilizaran para comprar votos, votos que nuestros paisanos los venden infortunadamente con diligencia al mejor postor. Si alguno de estos tres tristes tigres procesados consigue reelegirse, la continuación de la historia es asaz conocida. Esperemos que aparezca algún candidato con un programa definido y con bastante decencia. Dificilísimo pero no imposible.