lunes, 14 de abril de 2014
CALCO
Y COPIA LOS HEREDEROS CORRUPTOS
Nuestra historia
republicana es la historia de la corrupción. Corrupción que se ha ido
fervorosamente heredando y perfeccionando en sus mecanismos y sistemas por los
beneficiarios del poder. Desde los presidentes ocasionales hasta el alcalde del
distrito más pobre y olvidado del país. Todos conectados en el mismo compás y banquete.
Corrupción monumental que ha producido más pobreza, hambre y atraso, como
ninguna crisis mundial lo ha hecho, ni como guerra alguna de las tantas que
hemos enfrentado y perdido muy patrióticamente.
Y como las malas
costumbres se aprenden velozmente y, además se mejoran, lo que sucede en el
Gobierno Regional de Ancash, en otras regiones y municipios del país, no es más
que la copia, calco y permanencia de un sistema perverso de control,
manipulación y abuso para mantenerse en el poder y seguir desplumando sin bochorno
los fondos destinados para obras. Ancash es la réplica en pequeño de nuestro
Perú de la década del noventa cuando la inmoral dupla Fujimori-Montesinos pisoteaba
al país. Sometieron a la prensa (que se vendió diligentemente), al poder judicial,
a las Fuerzas Armadas. Apresaron opositores y asesinaron a otros tantos. Calco
y copia.
Y si de estos ejemplos
se trata, otro destacado por sus felonías, su ego monumental y su charlatanería
circense es Alan García. El dos veces presidente e innumerables veces salvado
por un poder judicial controlado por los apristas y fujimoristas. De los
crímenes que consintió, de los robos que ejecutó con una troika muy afianzada y
de sus bienes mal habidos, sólo queda la cínica sonrisa de la que hace gala. Si
evadió cobardemente la justicia una y más veces, los demás festejan la
revelación y aprenden la lección. Sin embargo, hay excepciones como la condena
a Fujimori y al prófugo alcalde chotano. EL mismo también hizo de aprendiz de
brujo de las malas artes de estos dos ex presidentes. Ahora la cárcel lo acecha.
Por eso no es de
sorprenderse que en la municipalidad de Chota tuvo que desmontarse toda una red
de micrófonos y cámaras puestos por doquier, para que Jeiner Julón vigile,
controle y grabe a todo el personal, los regidores de oposición, las reuniones
de comuna y todos aquellos que llegaban a suplicarle favores y dádivas. Se
comenta que en su domicilio tenía el mismo sistema cual salita del SIN. Se
asegura también, que conocidos chupamedias, periodistas y falaces pseudo
dirigentes ronderos, esos muy valientes muchas veces con indefensos ciudadanos,
pero adulones y encubridores de la mugre del corruptor, desfilaron por las
camaritas camufladas. Bochornoso, aunque curioso, sería observar esos julónvideos que deben estar a buen
recaudo, usados para callar a tanto cómplice y sinvergüenza.
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